La paz y la armonía gobiernan ahora mi vida y cualquier situación o lugar en que me encuentre.
Invoco a los ángeles para que me mantengan en la luz y en un estado constante de vibraciones positivas.
La salud y la vitalidad fluyen en mí como un poderoso caudal de agua de vida curativa para penetrar en mi cuerpo y en la atmósfera de cualquier estancia en que me encuentre.
Tengo toda la energía para cumplir todas mis actividades con facilidad, sin premuras.
Si en mis pasos cometo errores, vuelvo a empezar sin condenarme, pues estoy experimentado vivencias nuevas.
La fuerza de la vitalidad viene hacia mí y me hace sentir fuerte y vigoroso.
Invoco al poder celestial y a los ángeles para que me mantenga sano de cuerpo, alegre de espíritu y lleno de vida para siempre.
Así sea.
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